sobre nosotros


     Eran las 4 de la mañana de un sábado, la tormenta se había apoderado de la A1. Estábamos llegando a Madrid directos desde París después de mas de 24 horas trabajando. Esa misma mañana habíamos discutido y llevábamos todo el viaje sin dirigirnos la palabra. De repente PUM!, el limpiaparabrisas se partió y salió volando. Casi no teníamos fuerzas para seguir despiertos y allí estábamos, bajo la lluvia, en el arcén de la A1, enfadados, buscando un trozo de limpiaparabrisas que nunca encontraríamos. Pusimos una botella de plástico enfundando el metal que asomaba del limpiaparabrisas roto para que no chirriara contra el cristal de la furgoneta, que contaba ya con más de 800.000 km en el salpicadero. Volvimos a arrancarla y GUAU!, la botella funcionaba. Era una solución tan original y efectiva que los dos empezamos a reírnos. 


     Fue entonces cuando decidimos montar un negocio propio. Nos despedimos de nuestros jefes del mundo del cine y la publicidad. Montamos tres e-commerce. Una tienda de artículos para animales, una tienda de accesorios para cinefilos y una tienda de ropa, las tres se hundieron. No fueron tres fracasos, fueron tres lecciones.

Entonces la vida volvió a confiar en nosotros, la crisis de los e-commerce hizo que pensáramos en nuestras fortalezas. Juntando el vídeo al que habíamos dedicado tanto tiempo y la botella, nació la idea. Creamos una productora de vídeos, pero con una peculiaridad, ofreceríamos formatos cerrados (embotellados). No teníamos nada que perder, habíamos olvidado el miedo al fracaso y teníamos uno de los proyectos más revolucionarios del mundo del marketing digital.

Quien iba a decir que una botella cambiaría el mundo de la publicidad.


¡BIENVENIDO A VIDUCE!